Batlle Family, Uruguay

While the Bush family can boast of two US Presidents, the Batlle family of Uruguay holds a record for winning Presidential elections, with four presidents over the Uruguayan nation’s history.  The latest to win this honor is Jorge Luis Batlle Ibáñez, born on October 25, 1927 in Montevideo, Uruguay.  Batlle faced a number of difficulties, including a nation that was still recovering from a brutal military dictatorship and serious problems with corruption.  His approach has been forthright and innovative.  Soon after his election, Batlle disclosed his salary and the salary of his closest associates on the presidential website.   Batlle is a strong advocate of the Internet, and computer technology, and one of his key policies is for all Uruguayan students to become computer literate. Although Batlle is allied with many US policies, he is outspoken in his advocacy to legalize drugs as a means of decriminalizing the bloody industry.  As Batlle stated in an interview, “The day that it (drugs) is legalized in the United States, it will lose its value. And if it loses value, there will be no profit.”
Si bien la familia Bush puede presumir de tener dos presidentes estadounidenses, la familia Batlle de Uruguay tiene un récord de victorias en las elecciones presidenciales, con cuatro presidentes en la historia de la nación uruguaya. El último en ganar este honor es Jorge Luis Batlle Ibáñez, nacido el 25 de octubre de 1927 en Montevideo, Uruguay. Batlle enfrentó una serie de dificultades, incluida una nación que aún se estaba recuperando de una brutal dictadura militar y graves problemas de corrupción. Su enfoque ha sido directo e innovador. Poco después de su elección, Batlle reveló su salario y el salario de sus asociados más cercanos en el sitio web presidencial. Batlle es un firme defensor de Internet y la tecnología informática, y una de sus políticas clave es que todos los estudiantes uruguayos adquieran conocimientos de informática. Aunque Batlle está aliado con muchas políticas estadounidenses, es franco en su defensa de la legalización de las drogas como un medio para despenalizar la industria sangrienta. Como dijo Batlle en una entrevista, “El día que se legalice (las drogas) en los Estados Unidos, perderá su valor. Y si pierde valor, no habrá ganancias”.